Pelota andante al teclado.
He decidido hacer la entrada hoy porque hemos llegado a las
37 semanas,
casi 8 meses y medio, y se considera que hemos llegado a la recta final.
¿Cómo va el embarazo?
Todo va sobre ruedas. Esta semana tengo la que se supone que será la última analítica y la semana que viene me acercaré al médico de cabecera a por los resultados.
Técnicamente el embarazo ha llegado ‘a término’.
No es que vaya a dar a luz hoy ni mañana (eso espero) pero a partir de la semana 37 consideran que los bebés ya se han terminado de formar en todos sus aspectos y que lo único que van a hacer hasta el momento de su nacimiento es crecer y engordar.
Así que… comienza la recta final, la cuenta atrás para verle la carita a pequeña princesa, hasta la fecha oficial en la que la esperamos sólo quedan 21 días ^^
Hace unos días estuvimos de visita en urgencias pero nada, que estaba todo correcto.
¿Cómo va pequeña princesa?
Ella está estupenda, moviéndose, comiendo, creciendo y pegando unas patadas, manotazos y culazos increíbles.
Esposo me contaba el otro día que estaba yo por la noche durmiendo y él me puso la mano en la tripa y que estaba ella venga a moverse para un lado y para otro.
La verdad es que por la noche, no sé si por estar acostada y más “pendiente” noto que se mueve mucho más. Realmente me gustaría saber si tanto movimiento es una protesta porque no quiere acostarse, porque no encuentra la posición o algo, ¡¡quiero saber!!
¿Cómo va mamá cangrejo?
Estar estoy bien, algo molesta pero bien. De vez en cuando me dan calambres (por los movimientos bruscos) pero son llevaderos.
También estoy un poquito más hinchada, mi madre y mi cuñada dicen que tengo cara de embarazada (¿
y antes de qué tenía la cara, de alcachofa?). La alianza y el anillo de pedida hace ya unos cuantos días que he tenido que quitármelos porque los dedos se ponen a ratos que parecen chorizos, jajajajaja.
Nerviosa lo que se dice nerviosa no estoy. A lo que tengo miedo (si se le puede llamar así) es a ponerme nerviosa el día del parto y echar a perder toda la preparación que estoy haciendo: ejercicios de Kegel, pelota de Pilates, masaje perineal, infusiones…
¿Y papá cangrejo?
Nerviosillo está, para qué nos vamos a engañar. Muy pendiente a mí y a la niña, me hace caricias en la tripa para que le lleguen, le habla… estoy segura de que va a ser un padrazo.
La habitación ha quedado muy, muy bonita.
¿Cómo van las compras?
Sigue la locura y la desesperación, ha habido unos días en que me dio por pensar que le faltaba ropa, que no tenía suficientes peleles y cosas así. Incluso he hecho una mini lista con cosas que me faltan por comprarle, por ejemplo un termómetro de baño del que me he encaprichado. Sólo me queda pedirlo por internet porque en tienda física me ha resultado imposible encontrarlo.
Hace unos meses estuve pensando en qué ponerle para el día que saliera del hospital y me decidí por hacerle yo misma un vestidito. Con ayuda de mi madre se lo he hecho, se lo probaremos cuando nazca y si le queda bien… tendrá su vestido especial para salir del hospital y llegar a casa por primera vez.
Vale, no es el arrullo by Gucci con el que salió del hospital Sergio Ramos Rubio pero es el vestidito de lunares by su mamma.
Además, han empezado a llegar algunos regalos que me está haciendo la familia y amigas, vamos a tener que salirnos de casa para meter tanta cosa, jajajajaja.
Próximamente iremos a recoger la cuna y el carro.
De momento estoy en fase de lavar ropa y seguir lavando ropa, monto un tenderete donde menos lo esperas.
¿Cómo va el peso?
La verdad es que me he alejado un poco de mi cuasiperfección pero sigue estando dentro de lo razonable. Cuando quiero consolarme pienso que si hasta este momento hubiera cogido peso de más, ahora tendría que ir montada en una carretilla.
De momento, y a espera de que probablemente coja más peso sólo he cogido 10 kilitos de nada.
Anécdotas
En cuatro semanas han pasado unas cuantas, unas más graciosas que otras.
Mi madre ha estado de viaje y ha pasado casi dos semanas sin verme. El domingo, cuando le enseñé la barriga tras 12 días su cara fue algo así
Y sus palabras:
Vanessa por Dios, ¿dónde vas con esa pedazo de barriga? Ay por favor, tápala, tápala.
Mamá, pues a tirar el plástico del yogur, quita de en medio, jajajajajaja.
Ella también está muy contenta y con ganas de verle la carita a la pequeña. Ella, mi padre, mi hermano, mi cuñada y hasta a ratos mi sobrino (aún no entiende del todo el concepto de tener una prima pero no verla).
Otra anécdota que quería destacar es que normalmente la gente no pregunta si puede tocarte la barriga. A mí no me suele molestar y me preguntas por la barriga y te la enseño en un momento pero no sé, la gente con la que no tratas a diario y tal podía preguntar antes de poner la zarpa. ¿Acaso estoy loca por pensar así?
Y como siempre, siempre, siempre, están los comentarios de qué gorda estás.
- Madre mía!!! Esa barriga es de traer por lo menos dos criaturas.
+ Tres, son tres. Esta barriga es de faltarme 3 semanas para dar a luz y no ser muy alta
Tripota
Voy aumentando por momentos y cualquier día dejo de entrar en el campo visual del móvil.
Revisando las fotos me doy cuenta de cómo crece la panza y lo feliz que me hace.
Semana 34
Semana 35
Semana 36
Semana 37
Espero llegar a la semana 40 y hacerlo con ganitas de escribiros la última entrada de este estilo.
Ya os iré contando.